miércoles, 3 de julio de 2013

Los zombies existen.

A todos nos llama la atención esas series de televisión, películas y libros que hablan de los muertos andantes, zombies, caminantes... Esos que hablan de una extraña infección que hace que las personas tras morir, resuciten y sean capaces de continuar viviendo aunque con algunos cambios, no controlan sus cuerpos y mentes y simplemente vagan buscando satisfacer su "ello", en su caso el de comer abundantemente carne humana o cerebros.

Pues bien, aunque parezca mentira los zombies actualmente existen, pero no son como los de ficción, más bien son un producto de la sociedad, gente pegada a sus smartphones, que se viste de idéntica manera y que por alguna razón no tienen capacidad de pensar por si mismos, de dar su opinión, luchar o simplemente liberarse de la presión de grupo que ellos mismos buscan evitando de este modo el llegar a ser realmente libres.



Vivimos controlados, no por nosotros sino por lo que las grandes empresas dictan. Yo mismo, ahora mismo estoy escribiendo esto gracias a varios factores como son el tener electricidad, un ordenador e internet, por no hablar de los servidores que dan soporte a mi blog. Yo sin quererlo, ¡También soy otro zombi!.

Nadie, absolutamente nadie, es libre hoy en día. Somos pequeños esclavos de las grandes multinacionales que nos obligan a comprar sus productos, a invertir en ellas y que contribuyen al no desarrollo de nuestras cualidades artísticas por ejemplo. Sin ir más lejos, la música se ve muy implicada en esto, porque ya no existe casi arte en ella, solo existen discográficas que quieren dinero a toda costa y crean productos con la mera finalidad lucrativa cosa que me enfurece hasta limites insospechados al ser yo un humilde músico que ama el arte, no el negocio.

Podemos observar a numerosas hordas de adolescentes vistiendo camisetas de los Ramones sin saber que fue uno de los primeros grupos de punk junto a The Clash y Sex Pistols; de Nirvana sin saber la historia de Kurt Cobain o Dave Grohl... Adolescentes que viven detrás de sus smartphones, cuyo único entretenimiento es hacer botellón y jugar a juegos en sus móviles... ¡No tienen interés en lo cultural, en lo intelectual, en lo artístico...! ¿Qué tipo de sociedad estamos creando?. Duele y mucho ver como adolescentes desprecian un buen libro o por ejemplo a un chaval que se interesa por las artes o las ciencias tachándolo de ser un tipo raro, marginado y aburrido, cuando debería ser al revés...

Definitivamente, estamos un tanto perdidos, y nuestras propias vidas se nos están escapando de nuestras manos creando a una generación de zombies alcoholizados, incultos e irrespetuosos con el medio, otras personas e inclusive con ellos mismos... Sin valores morales, sin opinión, sin libertad...

Una pena, casi imposible de cambiar...

¿Contigo?

Ha sido maravilloso, tú y yo juntos, no me lo podía creer, ¡Felicidad!.

Fue maravilloso, tú subida a mi espalda caminando por la noche a través de la veraniega calle mientras me ibas dando besos, que bonito...

Era una sensación tan acogedora, romántica y esplendida el poder sentir tu calor y tu respiración en mi cuello, mezclado con tu dulce aroma perfumado.

Que corto y a la vez largo paseo con mi brazo sobre ti, caminando y hablando sosegadamente a la vez que cortábamos nuestra conversación con más besos y palabras de cariño...

Me mirabas y en tus ojos oscuros podía leerse perfectamente, en un idioma muy claro que me querías. Impresionante, es que es tan increíble que tanta lucha y sufrimiento hubieran dado con tu querer y con tu correspondencia... Que fuerte me siento ahora, que lleno; la amargura desaparece contigo.


Y es que nada como sentirte cerca de mi, mostrándome el cariño que tanto tiempo he pretendido mostrarte yo a ti sin ningún éxito y numerosas derrotas. ¡Que bonito!

Efectivamente, demasiado bonito porque no se como ha sido, de repente dijiste que debías marcharte y en ese momento yo volví en si, en mi cama, preguntándome si todo había sido un sueño... y sí, lo había sido, entonces me he resignado, ha explotado mi querer y me he dado cuenta de que aún no he conseguido curar mi amor por ti... que me duele mucho no tenerte pero que es la vida, y hay que ser estoico. Además en el fondo el amor duele, pero es un dolor que te hace sentir que estás vivo.


Por un momento tras darme cuenta de que ni estas aquí, ni me quieres, y que todo lo sucedido no ha sido más que un juego macabro de mi mente se podía oír esta canción... sin más... Te quiero.