miércoles, 3 de julio de 2013

¿Contigo?

Ha sido maravilloso, tú y yo juntos, no me lo podía creer, ¡Felicidad!.

Fue maravilloso, tú subida a mi espalda caminando por la noche a través de la veraniega calle mientras me ibas dando besos, que bonito...

Era una sensación tan acogedora, romántica y esplendida el poder sentir tu calor y tu respiración en mi cuello, mezclado con tu dulce aroma perfumado.

Que corto y a la vez largo paseo con mi brazo sobre ti, caminando y hablando sosegadamente a la vez que cortábamos nuestra conversación con más besos y palabras de cariño...

Me mirabas y en tus ojos oscuros podía leerse perfectamente, en un idioma muy claro que me querías. Impresionante, es que es tan increíble que tanta lucha y sufrimiento hubieran dado con tu querer y con tu correspondencia... Que fuerte me siento ahora, que lleno; la amargura desaparece contigo.


Y es que nada como sentirte cerca de mi, mostrándome el cariño que tanto tiempo he pretendido mostrarte yo a ti sin ningún éxito y numerosas derrotas. ¡Que bonito!

Efectivamente, demasiado bonito porque no se como ha sido, de repente dijiste que debías marcharte y en ese momento yo volví en si, en mi cama, preguntándome si todo había sido un sueño... y sí, lo había sido, entonces me he resignado, ha explotado mi querer y me he dado cuenta de que aún no he conseguido curar mi amor por ti... que me duele mucho no tenerte pero que es la vida, y hay que ser estoico. Además en el fondo el amor duele, pero es un dolor que te hace sentir que estás vivo.


Por un momento tras darme cuenta de que ni estas aquí, ni me quieres, y que todo lo sucedido no ha sido más que un juego macabro de mi mente se podía oír esta canción... sin más... Te quiero.


                                   

2 comentarios:

  1. Sueños, implacables y escurridizos, ojalá se dejasen atrapar o supiéramos el camino que nos conduce hasta ellos. Nos asaltan a traición y con nocturnidad para luego lanzarnos como náufragos a las costas desoladas de la vigilia. Un segundo antes de despertar podemos sentir cómo la sombra a la que nos aferramos se esfuma de entre nuestros dedos y ahí nos deja desorientados y perdidos, con la única esperanza de volver a cruzarnos con ella en los pasillos del sueño.

    Echaba de menos tu blog. A ver si te prodigas más. :-)

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    1. Malditos y a la vez queridos sueños... es triste pero al menos de este modo tenemos con nosotros lo que en la realidad no podemos conseguir. Aunque duele ver como tu mente te puede jugar malas pasadas con cosas que quieres por encima de todo...

      Gracias por tu apoyo para mi Blog, un saludo Didaskale, trataré de resucitar este blog poco a poco :)

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